HYPOMNEMATA

Los hypomnemata eran cuadernos de escritura: en ellos se encontraban citas, fragmentos de escrituras o pensamientos del propio espíritu. Constituían una memoria material de las cosas leídas, oídas, pensadas, y se atesoraban en esas páginas desordenadas, heterogéneas. Se trataba de un ejercicio en el pensamiento que no tenía como fin el decir lo indecible, sino captar lo ya dicho, de reunir lo leído. Eran escrituras sobre lecturas, y el fin de las mismas, la constitución de sí mismo. Era una escritura que posibilitaba la transformación de la verdad que nos damos a nosotros mismos. Una escritura que constituía con las propias palabras y las de otros un "cuerpo", como el propio cuerpo de quien, al transcribir sus lecturas, se las apropia y hace suya su verdad.







lunes, 13 de septiembre de 2010

Entrenosotros




Descontar las noches hasta cuando nos dimos a nacer juntos. Deshacer todavía más aquello que cada uno fija como propio, hasta encontrarnos en ese cruce en el que ya no somos uno ni otro, sino entrenosotros. No olvidar el olor de la mandarina que trajo a los niños, y después no dejar ir la imagen de ellos solos hincados dibujando y desdibujando rostros en la arena.

Crear nuestros laberintos con palabras propias, pero también encontrar los silencios propios que nos nombren. Y miradas que nos digan. Animarnos a dar saltos, arrojarnos, abismarnos, en las profundidades que constituyen ese afuera plegado, esa cavidad hueca a la que los padres suelen ponerle nombre. Entonces, seguir aprendiendo de lo que no somos, para llegar a ser los que somos.