HYPOMNEMATA

Los hypomnemata eran cuadernos de escritura: en ellos se encontraban citas, fragmentos de escrituras o pensamientos del propio espíritu. Constituían una memoria material de las cosas leídas, oídas, pensadas, y se atesoraban en esas páginas desordenadas, heterogéneas. Se trataba de un ejercicio en el pensamiento que no tenía como fin el decir lo indecible, sino captar lo ya dicho, de reunir lo leído. Eran escrituras sobre lecturas, y el fin de las mismas, la constitución de sí mismo. Era una escritura que posibilitaba la transformación de la verdad que nos damos a nosotros mismos. Una escritura que constituía con las propias palabras y las de otros un "cuerpo", como el propio cuerpo de quien, al transcribir sus lecturas, se las apropia y hace suya su verdad.







domingo, 21 de diciembre de 2008

felices incertidumbres


La otra noche soñé que estaba por parir, fue muy real: las contracciones, la tensión inusitada de un cuerpo, el propio, atravesado por una fuerza. No era un sueño acerca de un hijo (un hijo es un hijo cuando nació, antes, se escapa a cualquier conceptualización y comprensión que podamos hacer sobre lo que vendrá). Se trató de un sueño que manifestaba la sensación corporal de estar a punto de lanzar una "cosa" desde dentro, con una fuerza que le es propia, sin poder hacer otra cosa que dejarlo pasar. Que ser puente. Que darle el lugar que se viene haciendo. La única explicación que encontré fue que estaba terminando el año, y que tal vez realmente el 2009 sea un año nuevo. Debo estar pariendo lo que todavía no sé. Me entusiasmé con eso de parir una novedad todavía incierta. Así que auguro incertidumbres!!! ¿No es lo mejor que puede augurarse?